Lifestyle
Mes del orgullo: plant-based y queer
junio 28, 2019

Con banderas de arco iris inundando nuestras redes sociales, se celebra el Mes del Orgullo. El mes de junio está dedicado a honrar a quienes defendieron sus derechos durante los disturbios de Stonewall de 1969. Este hecho histórico sirvió como oportunidad para tomar una postura positiva contra la discriminación y la violencia hacia la comunidad LGBTQIA+, para promover la aceptación, la dignidad y la igualdad de derechos, y para celebrar la diversidad sexual y la variedad de género.
En ProVeg International nos comprometemos con crear un ambiente en el que todas las personas que trabajan en la organización sean libres de expresar su identidad sexual y de género sin temor a ser juzgados/as, discriminados/as o alienados/as. Con un grupo diverso de personas en ProVeg, le preguntamos a cuatro miembros de nuestro equipo que se identifican como queer si sienten que existe un vínculo entre el movimiento veggie y ser parte de la comunidad LGBTQIA+.
Esto es lo que respondieron:
JOE
“Definitivamente hay una conexión. Puedes encontrar conexiones en el movimiento de derechos humanos y animales, en la comunicación con amigos, familiares y colegas, y en la transición. Personalmente, experimenté la conexión de cómo un cambio en las opciones de vida de una persona, su sexualidad y su identidad de género está conectado con cómo la sociedad maneja este cambio. Cambié a un estilo de vida basado en las plantas porque quería hacer un cambio positivo a favor de los animales y sus derechos, a una vida segura y libre. Por lo tanto, pasé por una transición con respecto a mi alimentación, mi estilo de vida y la forma en que hablo de los animales. Hay mucho que explicar a la gente que me rodea, como: por qué estoy haciendo esto, cómo funciona y cuáles son los cambios exactos que se requieren. Debido al hecho de que todavía es nuevo para muchas personas y difiere de la alimentación y estilo de vida a la cual la gente está acostumbrada, hay mucha curiosidad pero también, a veces, resentimiento.
Esto es muy similar a mis experiencias como persona poliamorosa y genderqueer. No encajo del todo en la visión de la sociedad tal como es, que sigue operando según un concepto binario de género y monogamia como el principal modelo de relación. Por lo tanto, mi transición a ser una persona no monógama y no binaria es muy similar a mi transición a ser una persona que lleva una alimentación a base de plantas. También hay muchas preguntas, así como hay gente que lo encuentra interesante, hay gente que realmente no puede entender cómo funciona esto. A veces, puede ser muy difícil lidiar con estas cosas. Pero también hay mucho apoyo. Afortunadamente, tengo el privilegio de trabajar en un lugar como ProVeg, donde todos/as me aceptan tal como soy y me apoyan. Siento mucha gratitud por esto.”
M
“Tu sexualidad y género son parte de lo que eres y no pueden cambiar. Mientras que el estilo de vida vegetal es una elección consciente por tu bien y por el de los demás seres vivos. Teniendo en cuenta esta distinción, creo que, tanto el ser como el elegir se convierten en parte de tu identidad. Pero en lugar de discutir la diferencia entre ser queer y ser veggie, encuentro mucho más interesante e inspirador reconocer sus similitudes, incluyendo el valor que se necesita para ser parte de una minoría y el corazón y la mente abierta que se necesita para aceptarse y empoderar a los demás. Si eres activista queer o veggie, deberías concentrarte en los terrenos compartidos”.
PETER
“Siempre he sido una persona muy abierta con respecto a mi sexualidad, no tanto en términos de decirle a la gente que soy de cierta manera, sino más bien en términos de simplemente ser yo y actuar como me siento a pesar de cualquier censura de la sociedad. Crecí en Sudáfrica y la homosexualidad era ilegal, creo que mi franqueza es en muchos sentidos una respuesta a ello. Pero sé que mi expresión de libertad sexual y de ser muy afectuoso física y sexualmente con todo tipo de personas tuvo un impacto en la ciudad en la que vivía y ayudó a otras personas a vivir vidas más libres. Y aunque a menudo me refiero a mí mismo como gay, lo hago sólo por conveniencia, pero no es una etiqueta con la que me sienta tan cómodo. Del mismo modo, he sido veggie durante muchos años y nunca he sido muy dogmático al respecto. Solía tener muchas cenas y nunca he mencionado que la comida es vegetariana (de hecho, normalmente es completamente vegetal) y nadie parecía darse cuenta. Pero con el paso de los años, he notado que la mayoría de mis amigos/as y familiares ahora comen cada vez más comidas a base de plantas.
Para mí, hay una superposición entre estos dos aspectos de mi vida en el sentido de que ambos son áreas de la sociedad que una vez estuvieron marginadas y que se han desplazado cada vez más hacia el centro. Siempre he sido consciente de que la cultura queer (en lugar de la cultura gay, que es mucho menos inclusiva) a menudo encaja con la alimentación basada en plantas y me fascina el hecho, pero nunca he estado muy seguro de por qué es así. Creo que la liberación de la gente queer también libera a todos los demás, en el sentido de que crea menos presión para que la gente sea y actúe de cierta manera. Sospecho que la libertad social general que parece seguir después de la liberación sexual también ha ayudado a abrir el camino para una sociedad más abierta.
KAT
“Soy bi. Y llevo una alimentación vegetal. Desde mi punto de vista, mis dos rasgos no tienen mucho en común. Ser vegan es una decisión, mi amor y mi deseo no lo son. Sin embargo, puedo decir que soy afortunada y muy feliz de ser parte del movimiento veggie. La mayoría de las personas veggies son de mente abierta y están acostumbradas a cuestionar las normas comunes. Tienden a respetar las necesidades de los demás. Por eso me siento segura y cómoda hablando abiertamente de mis experiencias”.
Después de estos puntos de vista honestos y abiertos, parece que el mayor vínculo entre identificarse como un genderqeer y vivir una vida basada en las plantas es que ambos todavía no son vistos como la norma dentro de nuestras sociedades, y requieren mucho esfuerzo, apertura y explicación para ser socialmente aceptables.