Política
La UE se enfrenta al desacuerdo de la comunidad plant-based en cuanto a la aprobación de una enmienda hostil
enero 14, 2021
ProVeg International ha lanzado una petición para detener la enmienda 171, una enmienda hostil que pretende censurar las alternativas vegetales, con el apoyo de varias organizaciones no gubernamentales y de los principales agentes del sector alimentario.
Siguiendo la estela de la “prohibición de las hamburguesas vegetales”
Tras el éxito de la campaña lanzada el año pasado para detener la “prohibición de las hamburguesas vegetales”, ProVeg International tomará medidas para detener el enmienda 171.
La enmienda 171 se discutirá dentro del marco de los trílogos de la CMO, programados para comenzar el 27 de enero. A pesar de las ya existentes restricciones sobre el sector plant-based, incluyendo la prohibición del uso de términos como ‘leche de avena’ y ‘yogur de soja’, la nueva enmienda iría aún más lejos.
La nueva ley prohibiría cualquier uso de “evocaciones” de productos lácteos en los envases y en la publicidad de productos lácteos de origen vegetal. La prohibición podría incluso prohibir a las marcas el uso de imágenes de sus propios productos o la aplicación de cláusulas de exención de responsabilidad como ‘no contiene leche’.
La censura a las alternativas vegetales a los lácteos no solo contradice los objetivos de salud pública de la Unión Europea y la promoción de dietas saludables, sino que se opone directamente a los objetivos de sostenibilidad del Pacto Verde Europeo y la estrategia “De la granja a la mesa”. De aplicarse, supondría una amenaza sustancial para los objetivos climáticos del Acuerdo de París.
“Es desconcertante que, una vez más, la sostenibilidad tenga que justificarse. ¿Por qué sabotearíamos la innovación?
Jasmijn de Boo
vicepresidenta de ProVeg Interntional
En la práctica, la enmienda 171 podría prohibir:
– Describir un alimento de origen vegetal, su sabor o función, refiriéndose a la terminología popular y fácilmente reconocible y aceptada de ‘lácteos’. Por ejemplo, usar frases como ‘es como la leche’, ‘cremoso’ o ‘sabor mantequilla’ para informar al consumidor sobre el propósito, la textura o el sabor, ya sea en el envase o en la publicidad. También se incluyen descripciones informativas, aunque sean puramente objetivas. Por ejemplo, estaría prohibido utilizar frases ‘no contiene leche’, ‘apto para personas con intolerancia a la lactosa’ o ‘alternativa vegetal al yogur’.
– Mostrar el impacto climático, comparando la huella de carbono de un alimento de origen vegetal con su equivalente de origen animal.
– Utilizar la imagen de una bebida blanca de origen vegetal que se sirve en una mesa de desayuno, o de una espuma blanca que se arremolina en un capuchino.
– En su interpretación más restrictiva, esto podría dar lugar a prohibiciones de envases de alimentos de origen vegetal visualmente similares a los envases de productos lácteos de origen animal.