El proyecto GutPlantHealth

El grupo de investigación del Instituto IMDEA Nutrición, liderado por la investigadora Laura Marcos-Zambrano, busca estudiar a fondo el efecto de las dietas veganas, ovolactovegetarianas y omnívoras en la salud intestinal de las personas para comparar el efecto de cada una de las dietas sobre el microbioma intestinal, la inflamación y la salud en general.

Se sabe que las dietas basadas en plantas son una opción sostenible, saludable y además libres de maltrato animal, y a través del proyecto GutPlantHealth se tiene como objetivo aumentar el nivel de información científica que avale el aspecto relacionado con la salud y, al final del proyecto, crear una plataforma que promueva una alimentación más basada en vegetales.

¡Forma parte de esta investigación!

Para poder llevar a cabo una investigación con datos reales y saber cómo influye una dieta vegana, ovolactovegetariana u omnívora en la salud del intestino, es necesario tomar muestras de personas voluntarias que hayan seguido estas dietas durante al menos un año.

Información a tener en cuenta para participar en el estudio:

• Residir en la Comunidad de Madrid: las personas voluntarias deberán acudir en un par de ocasiones al Instituto IMDEA Nutrición.
• Disposición a participar proporcionando una muestra de heces (para el análisis de la microbiota intestinal).
• Disposición a dar una muestra de sangre (para evaluar los parámetros inflamatorios y nutricionales).
• Completar desde casa varios cuestionarios sobre alimentación y salud.

¿Por qué participar?

Mediante tu participación estarás contribuyendo al conocimiento sobre los mecanismos específicos mediante los cuales las dietas basadas en plantas influyen en la composición y funcionalidad de la microbiota intestinal. Esta recopilación de información es una herramienta valiosa tanto para la comunidad científica como para la población general, ya que ayudará a desarrollar en el futuro estrategias de nutrición de precisión y recomendaciones nutricionales dirigidas a la implementación de dietas sostenibles en la población española.

La importancia de la salud gastrointestinal

La salud intestinal es fundamental para el bienestar general, no solo para la propia digestión, ya que el intestino desempeña un papel fundamental en diversos aspectos de nuestra salud. Esto se debe a la microbiota intestinal, compuesta por trillones de microorganismos (principalmente bacterias) que habitan en nuestro intestino y que interactúan con nuestro cuerpo de maneras complejas.

De forma muy resumida, la salud intestinal es importante porque:

• Se encarga de la digestión y la absorción de nutrientes, un intestino sano es eficiente en la descomposición de los alimentos y en la absorción de nutrientes.
• Alrededor del 70 % de nuestro sistema inmunológico se encuentra en el intestino, actuando como una barrera protectora contra patógenos y ayudando a entrenar las células inmunitarias para que respondan adecuadamente a las amenazas. 
• Existe una comunicación bidireccional constante entre el intestino y el cerebro, conocida como el eje intestino-cerebro. El intestino es a menudo llamado el “segundo cerebro” porque contiene su propio sistema nervioso y produce una gran cantidad de neurotransmisores, como la serotonina, que influye en el estado de ánimo, el sueño y el apetito. 
• Ayuda a prevenir enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades del corazón y enfermedades inflamatorias del intestino.
• Puede influir en la forma en que el cuerpo extrae y almacena la energía de los alimentos. Algunos estudios sugieren que ciertos desequilibrios en la flora intestinal podrían estar relacionados con el aumento de peso.

*Criterios de exclusión

Si deseas participar en el estudio de NutriGut-Mad, debes tener en cuenta los siguientes criterios de exclusión:

• Enfermedad psiquiátrica o trastorno del comportamiento alimentario.
• Embarazo o lactancia.
• Personas con alguna incapacidad o impedimento que no le permita correcto seguimiento de las actividades propuestas o que no cumplan con los patrones dietéticos descritos.
• Haber tomado antibióticos, o cápsulas de probióticos, prebióticos en los tres meses anteriores al estudio.
• Enfermedades digestivas diagnosticadas (enfermedad de Crohn, síndrome de intestino corto, síndrome de intestino irritable o similares). 
• Cirugías de tubo digestivo.
• Consumo de fármacos que modifiquen los parámetros bioquímicos analizados.
• Otras enfermedades graves e inflamatorias.

Si tienes alguna pregunta o estás dudando si participar, puedes ponerte en contacto con nosotros/as a través del correo [email protected] o de nuestra página de contacto.