Los humanos tenemos una estrecha relación con perros y caballos porque los hemos domesticado. Este proceso hizo que los animales fueran capaces de distinguir nuestras expresiones corporales y faciales. Pero ¿qué pasa con los  animales considerados de granja?

Los perros y caballos cooperan con los humanos en muchas actividades. Hemos empatizado tanto que los llamamos animales “de compañía” y son miembros de la familia. Pero otros animales, como las cabras, no han tenido la misma suerte porque se han domesticado exclusivamente como producto, por su carne, leche, o piel.

Sabíamos que los animales considerados de granja entendían nuestro lenguaje corporal. Pero hoy conocemos algo más de su vida emocional. Investigadores de Universidad Queen Mary de Londres han descubierto que en particular las cabras pueden leer las expresiones faciales humanas. Es decir, pueden distinguir una cara triste y enfadada de una feliz.

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Lo más interesante que demuestra el estudio, es que estos seres prefieren interactuar con las caras felices, y lo hacen independiente del género de la cabra o de cara humana. Entonces, la capacidad de lo animales para percibir nuestro lenguaje facial no se limita a los domésticos de compañía, sino que puede estar mucho más extendida de lo que se creía anteriormente.

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Este estudio es evidencia de ello y abre muchas preguntas acerca de cómo interactuamos con el resto de animales. El doctor Alan Mcelligott que dirigió la investigación ha declarado:

“El estudio tiene implicaciones importantes sobre cómo interactuamos con el ganado y otras especies, porque las habilidades de los animales para percibir las emociones humanas pueden ser generalizadas y no solo limitarse a las mascotas”

Conocer más acerca del comportamiento de los animales nos está acercando mucho más a ellos, ahora ya lo sabes ¡sonríe a la próxima cabra que veas!

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Fuente: Trabajo original publicado en The Royal Society 

Artículo escrito por la bióloga y doctora en neurociencias Mayely Paola Sánchez para ProVeg España