No podríamos vivir sin los bosques. Cubriendo un tercio de la masa terrestre, son vitales para mantener la vida en nuestro planeta y frenar el cambio climático. Pero, lamentablemente, la deforestación por la ganadería destruye nuestros bosques.

Los bosques son fundamentales para el clima, el agua, la salud y los diferentes medios de vida, sin embargo, los estamos perdiendo a un ritmo alarmante debido a la deforestación: la destrucción masiva de árboles.

Una de las principales causas de la deforestación a nivel mundial es la ganadería, por ello, una medida que podemos tomar para frenar esta destrucción es adoptar una alimentación vegetal.

Hoy en día, alrededor del 70% de las tierras deforestadas en el Amazonas¹Cerri, C.E.P., C.C. Cerri, S.M.F. Maia, M.R. Cherubin, B.J. Feigl & R. Lal (2018): Reducing Amazon Deforestation through Agricultural Intensification in the Cerrado for Advancing Food Security and Mitigating Climate Change. Sustainability. 10, p.989, la mayor selva tropical que queda en el mundo, se utilizan como pastos para el ganado. Grandes extensiones de bosque, pastizales y humedales son destruidos para ser utilizados como suelo de pastoreo y para el cultivo de alimentos para animales.

Podemos ayudar a proteger los bosques eligiendo hábitos alimentarios más sostenibles y cambiando a una alimentación basada en plantas. Aquí, echamos un vistazo a cómo la ganadería destruye los bosques y las medidas que podemos tomar.

3 beneficios que obtenemos de los bosques amenazados por la deforestación de la ganadería:

1. La biodiversidad de los bosques ayuda a los ecosistemas a prosperar

Los bosques cubren alrededor de un tercio de la masa terrestre de la Tierra y son los ecosistemas de mayor diversidad biológica en la tierra. Estos bosques  albergan más del 80 % de los animales, plantas e insectos.

Cada especie vegetal o animal, por pequeña que sea, tiene un papel fundamental que desempeña, y mantener la biodiversidad aumenta la productividad del ecosistema. Por ejemplo, un gran número de especies vegetales permite una mayor variedad de cultivos, lo que contribuye a garantizar la seguridad alimentaria.

La pérdida de hábitat debido a la deforestación supone una gran amenaza para la biodiversidad, esta, además, sustenta la vida humana ya que afecta al aire que respiramos, al agua que bebemos y a los alimentos que comemos.

La continua deforestación en el Amazonas hará que los ecosistemas que necesitamos para sobrevivir dejen de sustentarse.

2. Los bosques regulan el carbono en nuestra atmósfera

Los bosques son fundamentales para regular el clima y los ciclos meteorológicos del mundo.

A menudo se hace referencia a la selva tropical amazónica como “los pulmones de la tierra” porque sus bosques liberan oxígeno y almacenan dióxido de carbono.

Los bosques son cruciales para abordar la crisis climática, absorben más de 2.000 millones de toneladas de dióxido de carbono cada año, lo que equivale a un tercio del CO2 liberado por la quema de combustibles fósiles.

Si la ganadería destruye esos bosques, este carbono se vuelve a emitir a la atmósfera, lo que contribuye significativamente al calentamiento global y nos impide alcanzar los objetivos del Acuerdo de París sobre el clima.

3. Los bosques preservan la calidad del suelo y sostienen a las poblaciones indígenas

La expansión de los pastos para satisfacer la demanda de la producción de carne de vaca, así como para la producción de cultivos para piensos (como la soja y el maíz), son los principales impulsores de la deforestación del Amazonas. Todo esto pone en riesgo de erosión a las tierras fértiles, que son ricas en materia orgánica.

Estos invaluables recursos naturales no pueden ser restaurados durante nuestra vida. La maquinaria agrícola, la sobrefertilización, las toxinas y los monocultivos agotan y aflojan el suelo.

Esta situación tiene varias consecuencias:

• El suelo es fácilmente arrastrado por el viento y la lluvia, lo que se traduce en aludes.
• Un suelo pobre da como resultado cosechas pobres, lo que a su vez hace que se requieran más tierras de cultivo para compensar, por lo tanto, se necesita una mayor deforestación.

La deforestación de tierras para la cría de animales también amenaza los derechos de los pueblos indígenas. Las tierras requeridas para la ganadería a menudo se superponen a los territorios indígenas. Más de 2.000 culturas indígenas dependen de los bosques como medio de vida, como fuente de medicinas, alimentos y refugio.

Se reconoce que la protección de los derechos indígenas es una de las mejores formas de proteger los bosques y, por lo tanto, de reducir las emisiones de carbono. Por lo tanto, la ganadería destruye los bosques y, a la vez, el sustento y el hogar de las familias indígenas.

¿PUEDE UNA ALIMENTACIÓN VEGETAL AYUDAR A REDUCIR LA DEFORESTACIÓN?

Sí, nuestras elecciones alimentarias diarias tienen impacto en la supervivencia de los bosques del planeta.

Varios estudios muestran que la elección de una alimentación basada en plantas puede ayudar a disminuir las necesidades de tierra²Hallström, E., A. Carlsson-Kanyama & P. Börjesson (2015): Environmental impact of dietary change: a systematic review. Journal of Cleaner Production. 91, p.1–11³Peters, C.J., J. Picardy, J. L. Wilkins, T.S. Griffin, G.W. Fick & A.F. Darrouzet-Nardi(2016): Carrying capacity of US agricultural land: Ten diet scenarios. Elementa: Science of the Anthropocene 4, no. 1 (2016): 1.⁴Meier, T., O. Christen, E. Semler, G. Jahreis, L. Voget-Kleschin, A. Schrode & M. Artmann (2014): Balancing virtual land imports by a shift in the diet. Using a land balance approach to assess the sustainability of food consumption. Germany as an example. Appetite. p.20–34 Mientras que un estudio de 2017 reveló que hasta el 55 % de la deforestación puede reducirse disminuyendo el consumo de productos animales, ya que así se necesitaría menos suelo.

También podemos ayudar concienciando sobre el impacto climático de nuestras elecciones de alimentos. El tema de la deforestación está empezando a ganar fuerza a nivel mundial, y ProVeg, con tu ayuda, aboga continuamente por un cambio urgente a una alimentación basada en plantas y un sistema alimentario más sostenible. Dentro de nuestros planes también está poner en boca de todos el vínculo entre la alimentación y la deforestación en el escenario mundial en 2021, en la próxima Asamblea de la ONU para el Medio Ambiente en Nairobi.

El cambio a una alimentación basada en plantas nunca ha sido tan fácil y tiene numerosos efectos positivos en el medio ambiente, como la preservación de la biodiversidad, el uso más sostenible de los recursos y la lucha contra el cambio climático.

Por eso, si quieres evitar que la ganadería destruya los bosques, haz el cambio a una alimentación más sostenible. Puedes ayudar a preservar los beneficios ecológicos, económicos, sociales y de salud que nos ofrecen.